«No tengo amigos» de Rafa Corega

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Musicalmente me considero un tipo más bien ecléctico. No tengo ningún empacho en reconocer que me gustan tanto el rock-western de La Frontera (como ya he comentado en otro blog), el chicle-pop de La Casa Azul, el hip hop de La Excepción o el punk-rock de Siniestro Total. Todo depende del momento en el que me encuentre.

Y en estos momentos ando escuchando una y otra vez este tema de Rafa Corega, que algunos dicen que es Faemino (y por algunos gestos que hace en el vídeo me atrevería a asegurar que tienen razón).

¿Por qué me hipnotiza esta canción? ¿Qué me impulsa a ponerla en modo continuo para escucharla una y otra vez?

Por una parte, la base instrumental. Ese bajo que destila mala leche, esa guitarra reforzando los seis acordes, esa sección «de viento-casiotone» y ese delirante solo de banjo en el medio de la canción me recuerdan al Siniestro de «Sesión Vermú«, sólo que más contundente.

Por otra parte la letra, que transcribo a continuación para mayor gloria internetera de Faem.. estooo… de Rafa.

Si generalmente criticáis
y en particular a mí

No os extrañéis que me dé por insultado
Un placer será veros con el cuello cortado
Con cuatro pelos haré muñecos de vudú
Entre las uñas clavaré cañitas de bambú

Atravesaré vuestro torax con con mi espada
Os daré por culo con una caña rajada

Si desprecio al mundo en general
y a la gente en particular

Para qué coño necesito yo de un amigo
Si disfruto solo mirándome el ombligo
Yo soy el preso que desde el cautiverio
Mataría a toda la gente sin criterio

Para mí la justicia no tiene balanza
Solo reconozco el valor de la venganza

Cualquier individuo que me mira mal
despierta en mí a un dormido animal

A base de hostias os quitaré de enmedio
llenaré las tumbas vacias del cementerio
os pegaré patadas en los huevos
inventaré mil y un tormentos nuevos

No tengo sentido del humor para la broma
Para estar conmigo has de hablar mi mismo idioma

Si seguís sin dejarme en paz
Vais a ver de lo que soy capaz

En mi cabeza se apagará un fusible
Voy a hacer que vuestra vida sea imposible
Al que no quiera caldo yo le daré dos tazas
Cumpliré hasta la última de mis amenazas

Y aunque comprendáis la razón de mis acciones
vuestra compasión me la paso por…

Si generalmente criticáis
Y en particular a mí…

Como veis, una serie de construcciones gramaticales que sólo usaría un gafapasta mezcladas con tacos barriobajeros. Un todo que nos deja frases (resaltadas por mí en negrita) dignas de lucirse en camisetas o para pintar en las paredes.

Y combinada esta letra de agresión, de violencia culta y a la vez descarnada con la voz «de plata» de Rafa y su gestualidad, nos da como resultado una obra maestra de la agitación tranquila, del cabreo sereno y cachondo. ¿Os imagináis esa música y letra en voz de grupos con voces menos «argentinas», como Def Con Dos o Joaquín Sabina? A estas alturas estaríamos en medio de una oleada de peleas callejeras multitudinarias, asesinatos de vecinos y compañeros de trabajo y violencia general sin justificación alguna.

Pero no. Gracias al tono que imprime el Orgullo de Occidente podemos utilizar esta canción para remitirla a quienes nos tocan los güevos diariamente, sirviendo como disparo de advertencia o de pescozón amistoso.

Verónicaaaa…. Te remití el vídeo de Rafa y seguiste dándome la brasa con tu voz de pitooooo…

 

Para mí es la mejor canción hasta el momento del artista de Castellón de la Plana, seguida muy de cerca por dos cuasi-himnos como son Odio a las ballenas o Mi hijo es un canalla, que comparten el sonido neopunk de No tengo amigos, pero que yo enmarcaría dentro del género de la canción protesta. Los demás temas, como esos homenajes al Fary y Camilo Sexto, o esa versión del himno de España (cuya letra comparto, pero cuya música electrónica aborrezco) me parecen simplemente unas pruebas de Rafa buscando su sonido definitivo.

Así que, si el Orgullo de Occidente llega algún día a este humilde blog, le señalaría que su sonido es, sin lugar a dudas, el punk/rock duro. En otros registros su talento y su mensaje sería motivo de chufla y correría el riesgo de ser confundido por un mero imitador a la estela de Rodolfo Chikilicuatre y su infame Chiki Chiki.

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4 COMENTARIOS

  1. ¡Cielos! Dos años después por fin un comentario en esta entrada, jajajja. Bienvenido, Lobo de Piedra, me alegra que te haya gustado lo suficiente como para que escribieras un comentario. ¡Nos leemos!

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