Y es que el Pequeño Bárbaro ya hace una temporada que no lleva ni pañales ni chupete, así que iba siendo hora de darle un retoque a las figurillas que nos representan al lado del título.
Para esta ocasión he tenido el inmenso honor y el placer de contar con el arte de Lorena Azpiri. No sólo plasmó lo que tenía en mente desde el primer boceto, sino que encima resolvió de una forma muy elegante la petición de mi Princesa. Y es que ella deseaba aparecer como una guerrera griega lanzando un hechizo de viento (influencia de la saga de Percy Jackson), pero sobre el papel quedaba raro sin que hubiera un objetivo a quien lanzárselo. Así que Lorena propuso que utilizara el hechizo para volar, lo cual, además de darle un plus de molonidad, hacía que encajara muy bien con la distribución de la cabecera anterior. ¡Dos pájaros de un tiro!
En cuanto al Pequeño Bárbaro, le hemos cambiado el atuendo porque lleva varios meses desarrollando una querencia a los barcos «piratas malos» en general y al capitán Garfio en particular un tanto… preocupante. Pero bueno, seguiré insistiendo para que se cambie de bando 😛
En fin, que me encanta esta nueva ilustración, perfecta para las chapas y las camisetas que ya son una tradición en casa. Eso sí, por aquí guardaré con muchísimo cariño la que teníamos hasta ahora, de la inigualable RU-MOR.

¡Muchísimas gracias, Lorena!
¡Genial!
¡Chulísima cabecera! ¡Bravo!
Fantástica.
Yo esperaré a tener la tercera aquí para hacerme una de esas, aunque no tenga ni blog ni na… ;P